Nota importante: Este artículo trata temas fiscales, por lo que sólo te resultará útil si resides en España. No obstante te animo a leerlo por si algún día decides vivir y trabajar aquí.
[alert_sensei]A pesar de que ya hace tiempo que soy autónomo, creo que este artículo puede resultarte útil[/alert_sensei]
Empieza un nuevo año y con él, muchos de vosotros me habéis comunicado que vuestro propósito va a ser empezar a buscar clientes para ofrecerles vuestros servicios. Bien, pues si ese es tu caso y vives en España, este artículo te resultará muy útil.
[intro]Ten en cuenta que a pesar de ser una de las temáticas más aburridas que se pueden leer, este artículo te puede resultar una salvación si estás empezando como freelance.[/intro]
Partimos de la base de que quieres ofrecer tus servicios de forma legal, es decir, que ya has pasado la fase de hacer tu primeros proyectos para tu cuñada, tu primo, tu amigo de la infancia, etc. El juego de ser freelance empieza de verdad y si quieres que tus clientes, los cuales en su mayoría serán pequeñas empresas, te tomen en serio no puedes ir por la vida facturándoles en negro.
Ahora estarás pensando que a ti no te compensa hacerte autónomo para los pocos clientes que tienes, o esperas tener en tu etapa inicial. Para quién no lo sepa (supongo que si eres español/a habrás sentido millones de quejas sobre ser autónomo, la mayoría de ellas ciertas) quitando las ayudas de las primeros meses que ofrece el estado, prepárate para soltar mensualmente la fabulosa quota de autónomos de 260€ (un poquito más), más los 50€ aproximados que te valdrá contratar a una gestoría para que te lleve todo el papeleo. Eso si no eres Rocky Balboa y te atreves a llevar tú todas las gestiones. Resumiendo 310€ cada mes, tengas o no clientes, más las queridas declaraciones trimestrales. Un sueño hecho realidad para los que como yo odiamos la burrocracia.
Pues nada… a seguir siendo ilegales y trabajando de hurtadillas para no levantar sospechas. Hasta aquí mi artículo de hoy.
No, sólo bromeaba. Por suerte existe una solución 100% legal a lo anteriormente expuesto. Se trata de las llamadas cooperativas de trabajo asociado.
Cooperativas de trabajo asociado:
Se trata de unas cooperativas a las cuáles puedes asociarte y que te permitirán facturar a tus clientes de forma legal, sin tener que ser autónomo. Es decir, se acabó el quedarse calvo o con el pelo más blanco que el floquet de neu (copito de nieve) por el miedo a llegar a fin de mes, no sólo sin cobrar un duro sino que además teniendo que soltar más de 300€.
Cuáles existen
Lo cierto es que cada vez existen más y cada una suele enfocarse en sectores distintos. A ti te interesan aquellas focalizadas en el sector de la informática y programación. Algunos ejemplos son: Freeautonomos, Factoo o Cooperativa Online. Todas ellas ofrecen condiciones casi idénticas.
Cómo funcionan
Voy a intentar resumirte su funcionamiento, sin entrar en detalles muy técnicos, pero que te permitirá hacerte una idea clara para ver si te interesa o no esta alternativa.
Primer paso: Hazte socio
Es obvio que si quieres unirte a una cooperativa te debes hacer socio de ella. Para ello deberás hacer un pago único de unos 100€, de los cuáles 80€ irán a parar al capital social de la cooperativa y que podrás recuperar el día que decidas dejar de ser socio (mínimo tres años) y 20€ de gestiones no reembolsables. No está mal.
A parte del pago, tendrás que rellenar una serie de formularios, firmar ciertos documentos y enviarlos por correo a su sede social. Todo el proceso termina con otorgarte un número de socio más un usuario y password de su herramienta de gestión.
Segundo paso: Cómo se factura y cuánto te va a costar
Ahora que ya eres legal, vamos a lo que importa. Partimos de la base que si no trabajas un mes no pagas nada (volverás a notar como tu melena crece y las canas desaparecen poco a poco).
Vamos un poco más allá y pongamos que has conseguido un cliente al cual piensas facturarle 500€ por tu servicio (605€ con el 21% de IVA). Analicemos paso a paso lo que acabarás recibiendo por tu trabajo:
- El IVA. Una de las pocas ventajas de ser autónomo era que el IVA te lo puedes desgravar. En este caso el IVA se lo desgrava la cooperativa. De esta forma te olvidas de tener que hacer declaraciones trimestrales. (Monto factura = 500€).
- Mínimo variable por la gestión. Que dicho de forma fácil significa que de cada factura que emitas se van a quedar el 6%. (Deducción de gestión = 30€).
- Cada mes que factures se te cobrará una cuota fija de 6€. Lo mismo da que hagas una factura, que hagas 20, te cobrarán únicamente 6€ ese mes. (Cuota mensual = 6€).
- Por cada 250€ que vayamos a facturar, tendremos que cotizar 1 día en el regimen general de la seguridad social. Es decir si vamos a facturar 500€, tendremos que cotizar 2 días. Ten en cuenta que tanto las altas como las bajas de la seguridad social se gestionan fácilmente desde una herramienta que todas ofrecen y son ellos quien se encargan de hacerlo, tú sólo debes indicar qué días deseas cotizar. Cada día suele tener un coste de unos 15,46€. (Gestión de seguros = 30,92€).
- IRPF mínimo del 2%. Tú eliges qué IRPF quieres que se te aplique. (Retención de IRPF = 9,28€).
- Impuesto de sociedades del 1% (Imp. soc. = 5€).
- Por fin llegamos a lo que vas a cobrar tú: 500€ – 30€ – 6€ – 30,92€ – 9,28€ – 5€ = 418,80€
Te animo ahora a hacer el cuento de la vieja para saber cuánto cobrarías siendo autónomo, ¿no salen los números verdad?
Principales ventajas:
- La más obvia es que si un mes no tienes clientes, no tendrás que pagar nada.
- No necesitas contratar una gestoría, ellos te resuelven todas las dudas que tengas a nivel fiscal.
- La gestión para cotizar en la seguridad social se realiza mediante una herramienta online y en un minuto lo tienes resuelto. Ya que son ellos quienes realizan la verdadera gestión.
- Los cálculos que te he mostrado antes se hacen automáticamente. Disponen de calculadoras que te permitirán saber cuánto vas a cobrar dependiendo de la cantidad que factures y el resto de parámetros.
- La generación de facturas también se realiza mediante su herramienta online. Ellos se encargan de generarla (olvídate de la enumeración de facturas), la envían a tu cliente (con el email que tú indiques y con copia a tu email también), reciben el pago en su cuenta y pasadas 24h, tú recibes lo que te corresponde.
- Puedes facturar a nivel nacional e internacional, con las ventajas que eso conlleva (ciertos países no tienen IVA).
- Adiós a las declaraciones trimestrales.
- Es la solución ideal si ya estás trabajando en una empresa, pero deseas facturar proyectos legalmente.
- Es compatible con cobrar el paro.
- Es legal y no se trata de ingeniería fiscal (¿o sí, qué opinas? jeje).
Conclusión:
El método presentado en este artículo opino que es la solución ideal mientras no seas capaz de generar unos ingresos mensuales recurrentes de unos 1700€, momento a partir del cual ya sale a cuenta ser autónomo.
Creo que es importante que seas legal desde el minuto cero, porque como ya sabes la ley suele castigar al pobre antes que al rico, no te la juegues, que las bromas suelen salir caras.
He decidido no publicar con cuál de ellas trabajo, para que no se tome este artículo como publicidad encubierta. Eres bien libre de optar por la solución que más te convenza y se acomode a tus necesidades.
Así que si piensas soltarme un comentario en contra de mi opinión acerca de los autónomos, adelante, estás en tu derecho.
¡Te mando un abrazo y empezamos el año!
PD: Si no eres de España y has llegado hasta aquí te animo a que nos compartas brevemente en un comentario cómo puedes facturar legalmente desde tu país, ya que es información que yo no puedo aportar. ¡Muchas gracias!