|
Esta mañana he visto amanecer desde un avión.
|
Me ha tocado sentarme al lado de la ventana y las vistas eran espectaculares.
|
El sol ha salido de entre unos nubarrones gigantes (que seguro tienen un nombre rimbombante) y en ese instante el avión ha metido varios meneos de esos que tienes que fingir que no te ha dado un mini infarto para no quedar de paleto.
|
El caso es que todo mi lateral ha empezado a hacer fotos al amanecer (yo también).
|
Y el chico sentado a mi lado le han dado como unos aspavientos de querer ponerse a sacar fotos pero se ha controlado por no pasarme el brazo por la cara.
|
Tras pasarse varios minutos con el baile de sambito parece que ha desistido y se ha dormido.
|
Por otro lado me ha tocado detrás un niño con la altura justa para practicar karate con con mis riñones.
|
Pero no me quejo, por fin tras empezar la pandemia puedo volver a volar.
|
Lo bueno de mis cursos es que no depende del sitio que te toque para poder verlos bien.
|
Pero que te toque un pesado al lado o un niño karateca ya dependerá de ti y tus circunstancias vitales.
|
|
|
|
|