Si eres autónomo o tienes una SL en España sabrás que estamos en época de trimestral.

Para el que no lo sea se lo resumo: cada tres meses toca pagar IVA e IRPF o lo que es lo mismo, toca soltar la guita.

Hasta aquí todo bien. Los que decidimos ser freelance en este país nos toca jugar las reglas de aquí.

Y como las reglas de aquí son peor que "Las doce pruebas de Astérix", sí o sí, lo primero que hace cualquier persona que decide hacerse autónoma es contratar una asesoría que le lleve el tema fiscal.

En mi caso llevo 5 años con la misma asesoría y todas las últimas trimestrales me la están liando parda.

Parda nivel de que por su culpa ya estuve investigado por hacienda durante dos años o detectarles (a tiempo) más de 60 fallos en la última trimestral.

En resumidas cuentas: parece que toda la información que les paso de forma completa y enfermizamente ordenada, se limpian el culo con ella.

Por suerte todas estas liadas (menos la de la inspección) las detecto siempre a tiempo porque me fío cero de ellos y reviso el centenar de líneas de Excel (que solo tienen que traspasar del que yo les paso) haciéndome trabajar siempre el doble.

Pero esto se acabó. Hasta ahora siempre pospuse el cambiarme de asesoría por si eso suponía un problema mayor que el actual.

Ya he decidido la nueva donde iré y estos días automatizaré toda la facturación con FacturaDirecta, ya que ellos trabajan con ese software y yo usaba otro método.

Lo bueno de esto último es que en la academia hay dos tutoriales geniales donde se explica paso a paso cómo hacerlo. Dos enfoques distintos de cómo integrar Restrict Content Pro + FacturaDirecta:

Uno de la mano de Esther Solà.

Y otro del compañero Nahuai Badiola.

David